Esther Borja: la canción cubana en una voz (+Video)

ARTIFICE DEL CANTAR IMBUIDO DE LIRISMO

Nacida en La Habana el 5 de diciembre de 1913, fue la intérprete favorita de Ernesto Lecuona, en fabulosas confabulaciones que implicaron el estreno de la zarzuela Lola Cruz y la canción Damisela encantadora.

Aunque sus inicios fueron en el teatro lírico, incursionó en todos los géneros de la música popular, con preferencia en la canción, estrenó numerosos títulos de Sánches de Fuentes, Grenet y Adolfo Guzmán, recorrió –en muchas ocasiones con Lecuona- países de América y Europa, donde fue reconocida como una cantante de primera línea en infinito horizonte musical.

A LA LUZ DE TUS CANCIONES

El día de su cumpleaños, el Ballet Nacional de Cuba rendirá tributo a esta cantante de amplísimo registro, cuya voz encierra la musicalidad de una orquesta, en la cual se presentará el estreno mundial del Ballet. Con "A la luz de sus canciones", con la coreografía de la prima ballerina absoluta Alicia Alonso, fundadora y directora del Ballet Nacional de Cuba, la compañía interpretará la más reciente creación de la primera figura de la danza mundial.

Este título abarca cinco interpretaciones vocales de la cantante, recuperadas en grabaciones históricas de sus creaciones sobre títulos antológicos de Ernesto Lecuona, Orlando de la Rosa y Adolfo Guzmán.

A partir de esta base musical, la Alonso ha recreado una atmósfera poética que traduce al lenguaje balletístico las imágenes sonoras creadas por los compositores, en una atmósfera que deviene una oda al amor.

Le solicité a Alicia que me hablara acerca de Esther en su centenario y, en breves palabras, definió su valoración integral acerca de ella: “Esther Borja ha sido un lujo de la cultura cubana. Una figura ejemplar por su fidelidad y permanencia. Que nos acompañó muchos años con su talento, cubanía y dignidad artística”.

LA GRAN DAMA DE LA CANCIÓN CUBANA

El barítono solista y fundador del Teatro Lírico Nacional, Pedro Arias Domínguez, asume la dirección artística de la gala homenaje a Esther Borja por su centenario, que se efectuará en la sala Rubén Martínez Villena de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, este jueves, a las 5:00 p.m. A propósito,  expresa su valoración acerca de la homenajeada.

“Es una artista de talla integral, a quien considero la gran dama de la canción cubana. En ella encontramos a una artista que ha cultivado todos los géneros de la música cubana y toda una gama de obras de los principales compositores nuestros como: Lecuona, Roig, Prats Greet, Guzmán y Fernando Mulens.

“Abordó con una gracia especial el género lírico, desde las primeras décadas de su carrera, después de su exitoso debut en Lola Cruz, opereta de Lecuona estrenada en 1935, en el teatro Auditórium.

“Ha sido y es reconocido por todos como la mejor Damisela encantadora y, en su legado histórico, Ernesto Lecuona le dio a estrenar sus siete canciones con versos de José Martí. También recuerdo con agrado su antológico programa Álbum de Cuba, en el cual a través de 25 años dio a conocer a los jóvenes talentos del arte lírico y la canción”.

UN EJEMPLO DE MAESTRÍA QUE NO SE HA VUELTO A REPETIR

La soprano lírica y profesora Gladys Puig, fundadora del Teatro Lírico Nacional de Cuba, define a Esther como “una artista muy importante de nuestra cultura. Es una cantante de voz dulce, bella y muy afinada. Intérprete de primera, sabía sacar el máximo a la interpretación, dándole importancia a los silencios y la respiración. En fin, una maestra.

“La conocí en un cumpleaños del maestro Lecuona. A partir de ahí cuento con su linda amistad. Es una persona sencilla, conversadora y simpática. Le gustan las flores, colecciona tacitas de café y ha formado una hermosa familia. Hemos compartido giras por todo el país cantándole a Lecuona y en conciertos de música cubana con Nelson Camacho al piano y las Orquestas Sinfónicas de las provincias.

“Además de promover a las jóvenes generaciones, los guiaba y contribuía a su formación profesional en los ensayos de su programa Álbum de Cuba.

“Recuerdo la famosa grabación a cuatro voces, que convirtió en un disco histórico, donde cantó en su amplio registro y fue creando un cuarteto increíble, en un ejemplo de maestría que no se ha vuelto a repetir. Es un ejemplo para los artistas profesionales y la juventud que comienza”.

NADIE EXPRESA LOS SENTIMIENTOS DE LA CANCION CUBANA COMO ESTHER

Luis Carbonell, el acuarelista de la poesía antillana, es un apasionado admirador del cantar de esta artista, a quien describe con una admiración que trasluce un amor a su arte:

“Canción cubana: amor, ternura, color, pasión, entrega, despecho, ira, clamor y sublimidad. Todas estas pasiones conforman la canción cubana y nadie ha alcanzado la altura de estos sentimientos en mayor medida que Esther Borja. Ella es la canción cubana.

“Aparte de todo esto, mi carrera y mi pensamiento le deben mucho, pero mucho, a esa dama de la canción…A esa damisela encantadora. Nadie ha cantado mejor que Esther Borja porque nadie ha conocido todo lo que es la canción, todos los sentimientos de la canción cubana que ella resume en ternura. El más alto y elevado agradecimiento es lo que siento por Esther”.

CANCIÓN DAMISELA ENCANTADORA

Por tus ojazos negros,
llenos de amor.
Por tu boquita roja,
que es una flor.
Por tu cuerpo de palmera,
lindo y gentil,
se muere mi corazón.

Si me quisieras,
figurina de abril,
mi vida entera
yo te daría a ti.
Si tus labios rojos
yo pudiera besar,
moriría de amor.

Damisela encatadora,
damisela por ti yo muero.
Si me miras, si me besas,
damisela serás mi amor.

Cuando a mí los galanes,
sin distinción,
me dedican requiebros
con gran pasión,
con mi aire de princesa,
bello y juncal,
les destrozo el corazón.

Si yo te diera
mis caricias de amor,
tu vida entera
se abrasará de ardor,
y mis labios rojos
tú pudieras besar
sabrías qué es amor.