Tu mejor maestra... ¿la recuerdas?, con esta pregunta abríamos un foro en nuestra revista y las respuestas arrojaron agradecimentos, momentos especiales y el cariño con el que sus participantes guardan los nombres de quienes fueron sus maestros en alguna etapa de sus vidas.
Y es que maestros como Alexander Suárez Pérez, un joven que cabalga cada día a un lugar donde practica una profesión difícil, pero sublime y que la enfrenta a través de la superación: "No es lo mismo la teoría que la práctica. Para dar clases con el multigrado hay que ser mago, hechicero, como dice un amigo mío. Tienes que prepararte de verdad, ponerle la vida a los medios de enseñanza, evaluar constantemente y exigir para que el estudio individual se convierta en una vía fundamental para el aprendizaje".
Por ello abundan los agradecimentos como los de Dalgis: como olvidar el nombre de mi maestra Milagros Charón Corrales, la que me enseñó a leer y escribir y que actualmente han pasado mas de treinta años y todavía está pendiente de mi y como marcha la educación de mis hijos.
Carlos Villanueva, hijo de alfabetizadores escribió: mi madre alfabetizadora y maestra graduada y pedagoga desde los años 40 del pasado siglo y mi padre un maestro singular, sin cursos pedagógicos, que nos enseñó a vivir.
Son miles las historias que llenan esa estrecha relación entre alumnos y profesores, disfrute de este Storify un pequeño homenaje a los artistas más nobles del mundo:
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