Se nos fue el avión en NORCECA… y ¿ahora?

Fiel a mi causa y con la idea de que llevarnos el cupo a los JJOO era una misión alcanzable, seguí las incidencias del partido final del Torneo Clasificatorio Olímpico de NORCECA que se disputó entre Cuba y República Dominicana en la noche de este sábado 5 de mayo.

Y es que todos soñamos con terminar la jornada sabatina disfrutando de la noticia de que nuestras morenas se incluían - una vez más- en la ruta olímpica del voleibol femenino; cuando digo todos, me uno a esos once millones que habitamos en esta Isla y otro tanto más que desde todos los lugares del planeta admiran, reconocen y siguen los resultados de un país que es historia en materia de voleibol.

Estuve al tanto de cada detalle gracias al seguimiento online que transmite la web de la Federación Internacional y fui parte de cada punto frío clavado en nuestra área, para obstaculizar la mejor opción que teníamos en la misión de contar una nueva historia olímpica.

La selección nacional estaba llamada a hacer las cosas con perfección porque solo así lograría llevarse “gato al agua” ante un equipo dominicano que ha sido muy difícil de vencer en los últimos tiempos.

Había que atacar con toda la fuerza y utilizar el servicio, que es otra de nuestras armas fundamentales, todo ello sin renunciar a la importante función en defensa, tanto de campo como sobre la net. Pero nada de eso sucedió, al menos con el empuje deseado, y dominicana resolvió en cuatro sets su boleto olímpico.

Los parciales del encuentro (18-25, 23-25, 29-27 y 20-25) quizás no sean lo suficientemente consecuentes con la inestabilidad mostrada sobre la cancha. Era la final anunciada y las dirigidas por Juan Carlos Gala pecaron al otorgar demasiadas libertades hasta el punto de cometer -nada más y nada menos- que 30 errores durante el partido.

Para colmo de males, Yanelis Santos —quien había llevado la voz cantante durante la competencia- estuvo imprecisa y tuvo que ser llevada a la banca sin sumar puntos para la causa nacional.

Estadísticamente Cuba logró sus puntos gracias a 52 acciones positivas en ataque, 3 en servicio y solo 9 en acciones de bloqueo; también recibió la bonificación de los 26 errores cometidos por el contrario. En el acápite individual, Yoana Palacios y Wilma Salas resultaron las más destacadas al sumar 24 y 14 puntos, respectivamente.

Sin embargo, el empuje quisqueyano fue mayúsculo y logró anular todos los intentos de rebelión de las nuevas morenas del Caribe; con protagonismo de la valiosa Bethania de la Cruz (25 ptos) y la experimentada Milagros Cabral (12).

Con esos truenos y un equipo cubano que no era capaz de eslabonar rachas importantes de puntos, fue imposible el cerciorarse de admirar el Palacio de Buckingham por la merced del boleto que se disputaba esa noche.

Merecida victoria de las muchachas de República Dominicana que ahora se unen a Estados Unidos, China, Italia, Argelia y el local Gran Bretaña convirtiéndose en la sexta selección que asegurara su presencia en la magna cita deportiva. Un par de horas más tarde se definió el séptimo boleto; esta vez por Europa y se lo llevó Turquía que después de arrasar en la fase preliminar, se sacó del medio a las gigantes rusas en la semifinal para concretar su cupo con imponente victoria de 3 sets por 0 ante la selección de Polonia.

¿Y AHORA QUÉ?

Como dijimos muchas veces, lograr el boleto Olímpico en el Torneo Clasificatorio de NORCECA era la mejor opción, pero la hemos perdido y en parte, casi que la dejamos escapar; sin intención de demeritar en lo más mínimo el trabajo de un elenco dominicano que al final, nos superó en todas las líneas de juego.

“Estos juegos son siempre difíciles. Cada vez que Cuba y República Dominicana se miden uno al otro los juegos son duros. Teníamos nuestro plan táctico pero las jugadoras estuvieron muy tensas. República Dominicana definió el partido. Quiero felicitarlas y desearles lo mejor como representantes de NORCECA en los Juegos Olímpicos”

Esas fueron las palabras - según el sitio oficial de la Confederación NORCECA de Voleibol - del DT cubano Juan Carlos Gala al término del partido final.

Declaraciones categóricas y ¡concluyentes!; cuya frase final de “Quiero felicitarlas y desearles lo mejor como representantes de NORCECA en los Juegos Olímpicos” se volvió la manera sutil de anunciar que Cuba no tendrá más oportunidades para buscar su cupo.

En teoría, hay otro “chance” en el Torneo Mundial de Clasificación a celebrarse en Japón entre el 19 y el 27 de este mes, donde se ofertarán las últimas tres plazas para Londres.

En la práctica, no nos queda nada; Joel García cortó de un tajo las esperanzas al aseverar, en Trabajadores, que no habrá más oportunidad para luchar por el sueño olímpico. Ese sueño olímpico que ahora deviene en pesadilla pues de esta manera, Cuba y su siempre insigne equipo de Voleibol Femenino firman la primera ausencia de la Mayor de las Antillas a esta lid desde que se debutara allá por Munich 1972 (salvando las ausencias que como delegación patentó el país en los Juegos de 1984 y 1988).

¿LAS RAZONES?

Quien escribe desconoce que puede ser eso que nos hace desistir de ir a luchar por un lugar en Japón. Hasta donde tengo entendido, Cuba tenía el derecho de acudir a la repesca por el NORCECA, sin embargo, ahora los cables de noticias empiezan a referir que ese derecho se le ha cedido a Puerto Rico.

Imagino entonces que probablemente la determinación tenga bases en la inestabilidad del conjunto nacional durante este ciclo olímpico. Una razón objetiva pero que a los efectos de tomar una decisión de tanto peso se vuelve muy “interesante” ya que tiene un trasfondo complicado, cuyo análisis necesariamente implicaría una revisión total de las políticas por las que hoy se rige la dirección del deporte en nuestra Isla.

En lo que a mí respecta y sin renunciar a la pasión que siempre me ha inspirado el deporte cubano, voy a quedar a la espera de que algún medio nacional se haga eco del por qué hoy renunciamos a esa estirpe de la que siempre nos hemos regocijado. Siento que acabamos de dar un gran paso en falso y no me suena “cubano” esto de deponer las armas en lugar de ir a pelear por un objetivo que es el sueño de ese equipo y de once millones de cubanos más.

Voy a aguardar, sin dar cabida a las especulaciones, pero lo haré con la fe de que existan más de un millón de razones y que su fundamento transcienda de lo monetario porque con el Voleibol, ese conflicto de presupuesto, ya ha tocado fondo.

En resumen, el evento culminó de la siguiente manera:

Posiciones: 1. República Dominicana, 2. Cuba, 3. Puerto Rico, 4. Canadá, 5. México, 6. Costa Rica, 7. Trinidad y Tobago, 8. Honduras.