Para desarrollar la memoria

La memoria es una de las funciones del cerebro. Gracias a ella podemos codificar, almacenar y recuperar informaciones de tiempos pasados.

Le memoria de los seres humanos es fascinante y un tanto misteriosa. Le prestamos la mayor atención y le exigimos grandes esfuerzos en nuestra vida diaria pues existimos tal como somos gracias a ella.

UNAS SÍ Y OTRAS, NO

La retentiva es la capacidad intelectual más valorada de nuestro cerebro. Solo determinados asuntos tienen para nosotros el suficiente interés como para desear perpetuarlos. Entre ellos se encuentran los más nuevas, interesantes,  atractivos y útiles a nuestros intereses.

Diferentes aspectos de nuestra vida cotidiana son reminiscencias evocadas con facilidad; Otros son olvidados muy rápidamente. La razón de la mayor permanencia se basa en la atención o el interés despertado por el hecho concreto. A veces no se recuerdan cosas porque mentalmente no han sido guardadas de la mejor manera.

CÓMO FUNCIONA LA MEMORIA

Determinados asuntos son almacenados en ella a largo plazo si el hecho se repite con frecuencia, la información se relaciona y se complementa con otra, es de marcado interés para nosotros o queda en el recuerdo unido con algún hecho significativo como sucede con las canciones vinculadas con una persona a quien hemos amado intensamente.

Muchas veces olvidamos determinados asuntos por falta de uso durante largos períodos o porque en su momento no se aprendieron correctamente al no utilizar el razonamiento.

Se habla de pérdida de la memoria cuando comienzan las dificultades para recordar hechos, situaciones o habilidades bien aprendidos anteriormente en el pasado, tal como sucede en la demencia senil o la enfermedad de Alzheimer.

ESTRATEGIAS BÁSICAS PARA DESARROLLAR LA MEMORIA

Antes de adentrarnos en técnicas o estrategias para desarrollar la memoria es importante señalar la obligatoria necesidad de propiciar cada día de nuestra vida la mejor nutrición para nuestro cerebrobasada en una alimentación sana y equilibrada.

Al mismo tiempo, no se debe tener absolutamente ninguna adicción tóxica como el tabaquismo, el alcoholismo o la drogadicción.

Se debe mantener un peso saludable y practicar sistemáticamente actividades físicas.

La frase  “ mente sana en cuerpo sano” es totalmente cierta.

EJERCICIOS PARA LA MEMORIA

Ejercitar de manera permanente el cerebro es clave para tener una buena memoria. Si no se ejercita, se atrofia. De ahí la importancia de mantener en la vida diaria un trabajo o actividad suficientemente creativos o complejos y con altas demandas de memoria.

Si siempre hacemos lo mismo y de la misma forma, la mente se acomoda a esa rutina y no se crean nuevas conexiones entre las células del cerebro. Por eso, es importante provocarlo, sacarlo de sus rutinas y ofrecerle nuevos retos.

En el llamado tiempo libre se debe evitar, a todo trance, dedicar demasiadas horas a ver televisión. Es una actividad donde el cerebro adopta una actitud totalmente pasiva. Se le debe dedicar  un tiempo estipulado y fijo preferentemente a programas muy seleccionados de corte educativo, informativo o refrescante para la mente.

Mientras más tiempo se invierta en actividades donde la memoria no sea retada, más posibilidades existen de desentrenarla y acabar sufriendo de grandes e indeseables olvidos.

Existen juegos para entrenarla y desarrollarla como el ajedrez o los crucigramas e incluso, aprender un nuevo idioma o estudios de superación a cualquier edad.

Las personas románticas deben memorizar poemas y canciones; los amantes de la cocina, recetas culinarias.

Con frecuencia se deben leer libros interesantes e instructivos y al final de cada capítulo hacer una síntesis de lo leído.

Hay ejercicios donde se necesita memorizar tales como: repasar de memoria listas o esquemas, recordar el nombre de una persona visualizando cómo es y dónde trabaja, actividades de razonamiento donde se entiende algo a través de asociaciones de ideas o resolver mentalmente problemas utilizando la lógica.

Se debe abandonar la peligrosa comodidad de no pensar, no memorizar o no razonar. Es fruto de una perniciosa rutina.

Retar a tu cerebro es divertido y útil. Perder la memoria, no lo es.