El taekwondo dejó ahora un triunfo y un fracaso para los cubanos que compiten en los Juegos Olímpicos de Londres 2012: por la puerta ancha salió Glenhis Hernández (división de más de 67 kilogramos) y por la estrecha Robelis Despaigne (más de 80).
La habanera, oro en los Juegos Panamericanos de Guadalajara, México 2011, resultó un tren contra la ucraniana Maryna Konieva.
El primer asalto resultó estrecho, y ganó por 1-0.
En el segundo, muy segura y dominante, amplió su ventaja, básicamente con acciones con sus pies hasta un 9-2.
Y en el tercero llegó incluso hasta la superioridad (16-2).
Así, imponente, entró en semifinales.
A esa fase no pudo entrar el santiaguero Despaigne, vencido por Anthony Obame, de Gabón, bronce en el torneo africano de 2010.
El cubano ganó el primero (2-0), lo cual hizo pensar en la posibilidad de terminar con la sonrisa.
Perdió el segundo (4-3), pero mantuvo ventaja estrecha de 5-4.
Y…cuando le faltaban 45 segundos para la victoria… cedió también en el tercero (2-1), lo cual provocó empate 6-6, y la necesidad de definición en el “Punto de la Muerte”, es decir, con el que primero lograra marcar.
El de la felicidad en esa fase resultó Obame.
Y ahora Despaigne estará “cruzando los dedos” para que su rival avance a la discusión del oro, y lo arrastre al repechage y a una posible medalla de bronce.
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