Por: Diana Cid
La red social ha señalado que su nuevo sistema le ha permitido identificar el 38% del contenido dañino difundido en la red social. Sin embargo, la plataforma no ha indicado cuál es la cantidad total de publicaciones abusivas ni la variación anual que han experimentado las eliminaciones.
Este es el primer intento de Twitter de recurrir a un sistema automatizado de suspensiones y bloqueos para moderar el contenido difundido en la app. En el pasado, la app dependía completamente de los reportes de usuarios, sin los que el contenido continuaba circulando por la web.
Además, la compañía ha eliminado más de 100.000 cuentas en lo que va de año que habían sido creadas por usuarios que cuyos perfiles habían sido bloqueados anteriormente y que trataban de hacerse pasar por otros para llevar a cabo actividades poco lícitas.
A pesar del éxito que ha obtenido esta regulación algorítmica, la red social ha señalado que estas herramientas aún siguen en etapa experimental y que la tecnología no se ha desarrollado lo suficiente como para ser incorporada oficialmente.
La incorporación de estas herramientas viene de la mano con otros cambios que ha hecho Twitter como las regulaciones a las cuentas spam a través del número de seguidores o las etiquetas para los tuits inapropiados de figuras públicas. Estos cambios tienen la intención de librar la plataforma de cuentas spam y contenidos dañinos que acaban perjudicando el sentido comunitario de la app.
Sin embargo, los datos difundidos por Twitter en su proceso de “limpieza” no han sido claros y no son representativos de los beneficios que han podido tener estas medidas en la red social. Es por ello que varios usuarios han reclamado la necesidad de informes de transparencia que revelen de forma objetiva cual ha sido el impacto de las acciones tomadas por la empresa.
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