//

lunes, 25 de noviembre de 2024

Mi tío el empleado

Una novela esencial para comprender la Cuba de la colonia…

Laydis Soler Milanés
en Exclusivo 16/03/2020
0 comentarios
Paseo del Prado
El libro muestra los lastres de la burocrasia y la corrupción en la Cuba colonial (Foto tomada de Habana Radio)

Vicente Cuevas, acompañado de su sobrino Manuel, llega a La Habana con el objetivo de comenzar una nueva vida. No lleva casi dinero, pero guarda un tesoro más preciado, una carta de recomendación de su primo el ilustre señor marqués de Casa-Vetusta.

Con un argumento a simple vista bastante sencillo, el libro “Mi tío el empleado” del escritor cubano  Ramón Meza Suárez Inclán, abre las puertas a un relato costumbrista sobre la sociedad cubana del siglo XIX.

Cuevas, con el uso de artimañas llega a convertirse en el rico conde Coveo y es su sobrino quien cuenta su historia.

Mediante esta, se resaltan temas como la corrupción, la diferencia de clases sociales,  los lastres del burocratismo sin fin y otros males de la época. Muestra la vida suntuosa de la alta sociedad en contraste con la de los pobres, y los entramados de los poderosos, sin negarle espacio también a la reflexión sobre la moral y el carácter de las personas.

Es sobre todo la historia de los funcionarios de la colonia y cómo en busca de un mayor nivel de vida y prestigio social, se enriquecen ilícitamente sin remordimientos.

Muestra de manera caricaturesca el deseo de escalar sin importar los de abajo y los problemas de una administración pública regida por incompetentes, muchas veces por personas que ni siquiera sabían sobre la vida en el país y de su pueblo.

Además,  habla la falsedad de los ricos y cómo se rodean de oportunistas como antes lo habían sido ellos en un modelo social que se repite y corrompe el obsoleto sistema colonial.

Destaca también por el uso poderoso de la descripción que utilizó Meza, capaz de transmitir las emociones, sentimientos de los personajes y el ambiente de acuerdo con lo narrado.

Sobre la novela, publicada en 1887, José Martí escribió una crítica en el periódico neoyorquino “El Avisador Comercial”. En ella comentó que en sus páginas queda al descubierto la desvergüenza de la burocracia de un imperio ya en decadencia, pero persistente aún en la Cuba oprimida. “(…) ha levantado la máscara funambulesca de estos auténticos personajes trágicos (…) Es un teatro de títeres, de títeres fúnebres”.

  • Diponible para compra en Amazon en este enlace.


Compartir

Laydis Soler Milanés

Periodista, amante de la literatura y de la buena música.


Deja tu comentario

Condición de protección de datos