Cristiano, Messi y el Balón de Oro, la historia de nunca acabar

Con los cuatro goles de Cristiano en el repechaje ante Suecia se desata una vez más los debates de siempre. ¿Quién es mejor? ¿Para quién debe ser el Balón de Oro? Sin novedades. Es una discusión para nunca acabar, y siempre termina en críticas ilógicas a ambos.

Messi tiene registros estratosféricos y casi todos sus premios (excepto el Balon D’Or del 2010) no necesitan justificación, pero La Pulga aún tiene un lunar en su hoja de servicios, el cual puede borrar bien pronto: Copa Mundial. Lionel es el segundo artillero histórico de Argentina, pero si analizamos bien los números, no son muy alentadores. De los 37 goles anotados con la albiceleste hasta hoy, 20 han sido en amistosos, 14 en eliminatorias mundialistas, dos en Copa América y uno en Mundiales. Si comparamos sus números con los de Batistuta, las alarmas saltan. Batigol marcó 56 goles en 78 partidos para un intratable promedio 0,72. Messi lleva 37 en 83,  con un respetable 0.44. De los 56 del Bati, 10 fueron en mundiales (máximo anotador por la albiceleste), 13 en Copa América, 4 en Copa Confederaciones, 11 en Eliminatorias y dos en una Copa Kirin, para un total de cuarenta. Solo dieciséis fueron en partidos amistosos. Sí, Batistuta marcaba goles con la selección como Dios manda. Messi igual lo hace con su club, pero le queda ese estigma con la absoluta y si no aprovecha este Mundial, al menos para ganarlo aunque no marque… entrará en la lista de los mejores de la historia con el “pero”. Por estos días recibió su tercera Bota de Oro, único jugador del mundo en ostentar el lauro.

Con esta retraída de datos no pretendo cambiar ningún criterio, solo hacer la acotación de la necesidad de Messi de explotar en una competición importante con la selección, porque su calidad está fuera de dudas, de hecho, las dudas saltan cuando uno se pregunta si no es el mejor de la historia.

En el caso de Cristiano, dos grandes desgracias le acompañan. La peor de todas es haber coincidido con Messi. La segunda es formar parte del Fiorenteam. A Ronaldo se le puede comparar con otros grandes de la historia en cuanto a números, pero el calvario de los títulos (que no es tal porque ya ganó una Champions y tres Premier League, además de una Liga española y cuatro copas domésticas) pesa sobre su nombre. El fútbol es así, la ingratitud se traga a los goleadores y solo se recuerda los grandes ganadores. De Just Fontaine casi ni se habla, pero su record de goles en una Copa del Mundo parece inamovible: trece goles, dos menos que el récord absoluto de Ronaldo, el brasileño. Y es curioso, “el fenómeno” nunca levantó la Champions y solo acumuló dos Ligas Españolas, y una serie de Copas en Brasil, Holanda y España, además de una Copa de la UEFA, palmarés inferior al de CR7, pero con su currículum internacional no hay comparación posible: dos Mundiales, dos Copa América y una Confederaciones. Todas estas componen una suerte de pasaporte al altar de los dioses del fútbol. Messi también debe mirarlo con añoranza. Además, todos sabemos quién es el máximo goleador de todos los tiempos en Copas Mundiales. Conclusión: luso y argentino necesitan títulos internacionales, Cristiano mucho más.

Ahora, para seguir con el debate de siempre, debemos dejar claro cómo se entrega el FIFA Balón De Oro. Y de ser posible, qué premia. Desde el 2010, (des)gracias a la fusión del Balón de Oro con el FIFA World Player, votan por el premio los capitanes y seleccionadores nacionales de los 209 federaciones que componen la FIFA y un periodista de cada uno de los 170 países afiliados a la misma. En otras palabras, solo un tercio está comprometido a emitir un criterio bajo ciertas bases porque representan a su medio. Los futbolistas y entrenadores pueden votar por quien sea pues nadie les va a reprochar. Incluso si son nacionalistas: Buffón y Prandelli votaron por Pirlo el año pasado, Casillas votó por Ramos y Del Bosque por Casillas, y así sobran los ejemplos. En 2010 Sneijder o Forlán eran las únicas opciones posibles, porque le pese a quien le pese, fueron los mejores futbolistas ese año.

Hoy se habla de la posibilidad de que Ribery rompa con la dictadura de Messi; ¿alguien cree que el francés supere al argentino y a Ronaldo? Sí, triplete con el Bayern, pero recordar a Sneijder, con triplete y una final de Copa del Mundo, y ni siquiera aparecía entre los tres finalistas. Además, Francia se las vio negras en el repechaje, y Ribery no es un futbolista mediático.

Ahora la fecha límite de la votación se amplió hasta el 29 de noviembre, y si alguien duda de que es para incluir la espectacular actuación de CR7 en la repesca, está fuera de sus cabales. Son muchos los que merecen este premio, el más importante en el mundo del fútbol y que premia… aún no se sabe bien, pero todos lo desean.

No obstante, insisto, el ganador volverá a repetirse entre el portugués y el argentino, posean o no los méritos. Es una cuestión de popularidad. Y si solo un tercio de los votantes son supuestamente “especializados”, Hay pocas las esperanzas de una ruptura de la hegemonía.