I
“De buenas intenciones está empedrado el camino del infierno”.
Entre otros muchos, este refrán nos invita a la acción. Sí, que el papel que en la vida desempeñamos no se restrinja sólo a los buenos deseos.
II
“Cuando el majá sube al palo, el palo tiene jutía”.
Este refrán es la versión popular de la científicamente llamada “relación de causa y efecto”.
Sí, cualquier hecho ha tenido como antecedente algo que lo ocasionara.
III
“Tienes en tu casa al muerto y vas a llorar a la ajena”.
Es decir, no hay que andar ocupándose de las interioridades de hogares ajenos cuando el propio está falto de cuidados.
IV
“Por mucho que tenga el muerto, con una caja basta”.
En efecto: llegado el momento del salto final, de nada valen las riquezas materiales.
V
“Hay muertos que no hacen ruidos porque andan en alpargatas”.
Este refrán nos pone en guardia contra los que llamamos mosquitas muertas.
VI
“Bien predica quien bien vive”.
Muy sabia observación. Valen más los hechos tangibles que los sermoneos, después no sustentados con realidades.
VII
“Al que hace de miel, se lo comen las hormigas”.
Así es. Se puede ser bueno… ¡pero no tanto!
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