Para mantenerse joven a pesar de los años

A medida que pasan los años, poco a poco se va envejeciendo. Pero existen muchas personas que a pesar de sus años cumplidos parecen mucho más jóvenes de lo que corresponde a su edad cronológica, no solo en su aspecto físico sino en su agilidad mental, gestualidad, gustos, manera de vestirse, etcétera. Por otro lado, otros de la misma edad se avejentan y se vuelven unos viejos de los llamados “cañengos”, llenos de achaques y de enfermedades y hasta necesitados de ayuda para subir un escalón. Por eso es necesario, y resulta posible, envejecer de forma adecuada de acuerdo a nuestra edad o aún más despacio que ella. Para alcanzar esa soñada meta debemos llevar una vida totalmente saludable y evitar y/o eliminar una serie de hábitos y adicciones en nuestro día a día que sí harán envejecer de forma prematura.

NADA DE ADICCIONES

Se debe eliminar de raíz y sin contemplaciones la adicción al tabaco, pues fumar, además de lo dañino que es para la salud y para el bolsillo, es muy perjudicial para la piel, pues contiene radicales libres que son los responsables del proceso de oxidación y envejecimiento prematuro de la tez, produciendo arrugas precoces por toda la cara. Además, el tabaquismo pudiera estar vinculado con los llamados patrones de metilación del ADN, proceso interconectado directamente con un envejecimiento real.

Al igual que con el tabaco, el consumo de alcohol, y más si se tiene la adicción o se cae en la categoría de a quien “le gustan los tragos”, es perjudicial para la salud en su totalidad y favorece hacerse un viejo prematuro en particular. En este caso la solución es bien sencilla, eliminar su consumo, sustituyéndolo por otras bebidas más saludables como son los jugos de frutas naturales, la leche o el yogur. Hay que tener el corazón en el medio del pecho o llevar los pantalones bien puestos, aunque sea una sola vez en la vida, para erradicar definitivamente tan funestas adicciones; pero se debe tener muy en cuenta que es una solución que aporta innumerables beneficios personales, familiares, sociales y económicos, y absolutamente ninguna pérdida, pues todo es pura ganancia.

CONTROL DE LOS NERVIOS

Sufrir excesivo estrés, más allá del necesario, se encuentra presente en la vida de la mayoría de las personas. Han sido comprobados los efectos perjudiciales que tiene el estrés sobre la salud en su totalidad, estimulando además un envejecimiento antes de tiempo o precoz. Con el fin de neutralizarlo se deben aprender y aplicar técnicas de relajación, hacer ejercicio diariamente, instruirse en las mejores formas de respiración y, en casos graves, acudir a un profesional. Se debe vivir una vida feliz y relajada, eso sí, sin bajar la guardia, pero en su justa medida. No hay por qué exagerar.

BUENA ALIMENTACIÓN Y EJERCICIOS

Tener una mala alimentación y llenarse de comida chatarra es una de las causas principales del envejecimiento, así como la obesidad siempre sumadora de años. Al no mantener una balanceada y correcta nutrición basada en alimentos saludables, solo se gana en obesidad, uno de los principales elementos para el deterioro y el envejecimiento de los órganos. Además, al consumir un exceso de azúcar se está sometiendo al cuerpo y al páncreas a un excesivo esfuerzo para lograr obtener el control metabólico de los azúcares, además de incrementar el envejecimiento celular de los tejidos.

Tampoco se puede llevar una vida sedentaria. No hacer nada de ejercicios y permanecer mucho tiempo sentado o acostado provocará un envejecimiento antes de tiempo. Cuando no se practican deportes acordes a la edad y el estado de salud, se pierde masa muscular y se provoca que el cuerpo tenga una edad fisiológica y presencial mayor de lo que le correspondería. Aunque en la vida actual, sobre todo con el teletrabajo, puede haber ciertas dificultades para incorporar el ejercicio al paso de los días, las personas inteligentes que se quieren a sí mismos, y que se cuidan, no deben renunciar a él. Es importante planificarse para disponer de un tiempo diario que no tiene que ser prolongado, con el fin de hacer algo de actividad física, ya sea en la propia casa, sacando a pasear a nuestra mascota, ir caminando al trabajo o realizar los mandados que tengamos, por supuesto, tomando las medidas oportunas para protegernos de la COVID-19.

SUEÑO Y SOL

Dormir poco y no descansar lo suficiente es perjudicial para la salud. Múltiples investigaciones han demostrado que la falta de sueño influye de manera evidente en el envejecimiento de la piel. Y, por si fuera poco, parece que hay cierta relación entre dormir mal y el riesgo de padecer Alzheimer. Por lo tanto, se debe planificar un horario de sueño, evitar los celulares y las películas de horror y de tragedias antes de dormir, y hacer los ejercicios diarios para conseguir tener un descanso físico y mental adecuado por la noche.

Es necesario proteger la piel del sol, pues exponerla directamente a esa luz sin ningún tipo de protector solar puede acelerar el envejecimiento hasta en 10 años. Por este motivo es muy importante cada vez que vayamos a exponernos al sol, que nos apliquemos un protector solar adecuado o, si es posible, evitarlo.

UN BUEN CONSEJO

Como cualquiera ha podido darse cuenta, evitar el envejecimiento prematuro y el acortamiento de los años de vida está en las manos de cada cual, sólo hay que deshacerse de ciertas cosas, transformarse para bien propio, y de esta forma la salud y el aspecto general mejorarán alejando las posibilidades de convertirse en un viejito o una viejita necesitado de ayuda, pues se mantiene la lozanía física y mental, incluso más allá de los años cumplidos. Y si no lo creen, solo tienen que comenzar a mirar a su alrededor para encontrar muchos longevos y además con muy buena presencia. Ellos sí han sabido cuidarse.