Cómo eliminar una adicción

Prácticamente no existe diferencia entre abusar de una sustancia adictiva como tabaco, alcohol o drogas ilícitas y una plena adicción derivada de un previo uso.

Fumar marihuana unas cuantas veces no significa ser un adicto. Pero resulta suficiente comenzar un camino autodestructivo como éste para acabar envueltos en el vicio. Evitar el primer paso es lo esencial para evadir la trampa sutil entre el vicio y la inmoralidad.

TIPOS DE ADICCIONES

Existen dos: la física y la psicológica. La adicción física es cuando una persona se convierte totalmente dependiente de uno o más sustancias como puede ser el tabaco, el alcohol, la marihuana, la cocaína, la heroína, etc

Durante la instauración de la adicción aumenta la tolerancia a determinada sustancia. Por eso se necesitan cada vez dosis mayores para obtener el mismo efecto. Quienes comienzan a fumar lo hacen con uno o tal vez dos cigarrillos quizás no todos los días. Ya convertido en un adicto al tabaco, necesita consumir una cajetilla de cigarros o más.

Quien es totalmente dependiente y deja o demora en consumir cualquiera de estas sustancias, sufre del llamado síndrome de abstinencia. Algunas manifestaciones del mismo son diarrea, debilidad, temblores, fuertes cambios de carácter y un gran malestar.

La adicción psicológica se presenta cuando el desespero por consumir una droga es mental o emocional. Quienes son psicológicamente adictos sienten un deseo insuperable de consumirlas. Fácilmente pueden mentir, cometer actos indignos e incluso robar para conseguirla.

YA SE ES UN ADICTO

Se cruza la línea separadora del consumo de la dependencia cuando ya no se utiliza  solo para divertirse o para pasarla bien entre amigos; sencillamente y casi sin darse cuenta, la sustancia se ha vuelto imprescindible.

Entonces la vida de un adicto se centra en su necesidad por la droga. Una persona adicta siente y sufre al no poder dejar de consumirla.

LAS MARCAS DE UNA ADICCIÓN

Entre las manifestaciones psicológicas delatadoras de un adicto se encuentra la pérdida de interés en actividades que resultaban importantes, problemas con el rendimiento escolar o laboral o con las amistades, ansiedad, ira o depresión, etc.

Entre las manifestaciones físicas se presentan cambios en los hábitos de sueño,desaliño corporal, deficiente higiene, dentadura en mal estado, ropa sucia, debilidad corporal, delgadez,inapetencia o hábitos de alimentación inadecuados, malas relaciones en el seno familiar, etc.

SALIR DE LA TRAMPA

Una adicción puede ser producto de una ingenuidad o una debilidad de carácter, pero no convierte a nadie en un ser despreciable.

Reconocer que se tiene un problema es el primer paso para comenzar a abandonar una adicción.

Muchas personas no pueden superar el problema a solas. Se debe buscar alguien de confianza para hablar. Pueden ser familiares, amigos o profesionales.

Si hay un desliz o una recaída, se debe volver a hablar inmediatamente con alguien de ayuda. No hay nada para avergonzarse, pero es importante conseguir ayuda lo antes posible para no perder todo el esfuerzo dedicado a la recuperación.

La liberación de una adicción a las drogas no termina con un programa de tratamiento. Es un proceso para toda la vida.

Para muchas personas encontrar un grupo de apoyo puede ser la clave. Compartirá con personas que han pasado por las mismas experiencias y  tendrá la oportunidad de escuchar  vivencias reales de los demás.